El 10 de noviembre los españoles estamos llamados a las urnas, después del nuevo fracaso cosechado por Pedro Sánchez, que ha sido incapaz de lograr los apoyos necesarios para sacar adelante su investidura, o quizás deberíamos decir que ha alcanzado su objetivo marcado a fuego en en su calendario nada más acabar la noche electoral del 28 de abril, porque el presidente en funciones ha dado la sensación que tenía como principal objetivo una nueva cita electoral desde el primer instante. 

El espectáculo que dieron en julio tanto el PSOE como Unidas Podemos con declaraciones de unos y de otros, con filtraciones de documentos de negociación a la prensa quedará para la triste historia de la democracia española. Capítulo a parte merece también el papel de Albert Rivera en los minutos de descuento, con una propuesta a Pedro Sánchez que buscaba la propaganda política ya tan manida en la formación naranja, operación de marketing para tratar de quedar bien ante la opinión pública y para a buen seguro mejorar a la desesperada encuestas internas que no auguran buenos resultados para Ciudadanos.

Los españoles mientras tanto miran atónitos el espectáculo de la mayoría de la clase política, incapaz de ponerse de acuerdo para permitir una investidura, algo impensable en cualquier otro país europeo. La nueva política ha traído a España un absoluto desgobierno y ya son muchos los ciudadanos que se preguntan de forma insistente si no vivíamos mejor con el bipartidismo, este mismo que les escribe lo piensa, y miren que he aportado mi ínfimo granito de arena a la mal llamada «nueva política», y la verdad es que es un tema recurrente para abordar en próximas entradas.

No quiero acabar estas líneas sin denunciar el uso partidista que el presidente del gobierno en funciones ha realizado de la Moncloa en la tarde noche de este martes, una institución que hoy Pedro Sánchez ha degradado utilizándola como un mero escenario de un mitin electoral del PSOE. Las formas en política son importantes y en eso el todavía hoy inquilino de la Moncloa tiene mucho que mejorar.

 

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